La Diosa

La Diosa, Escalus.
De una árida tierra este ser creo esplendor y vida, trayendo así a NeoVerona. Es la natulareza misma, el viento que sopla por todos lados y que siempre lleva todos los secretos del mundo consigo, la tierra fertil donde todos pisamos, el fuego que danza y trae destrucción, pero a la vez es cálida y proporciona energía y vida a todos, el agua que es simbolo de la vida misma y siempre fluye a corriente, sin quedarse estancada.
Estos y más son los conceptos que todos los ciudadanos de NeoVerona tienen de su diosa benefactora, quien da fruto y trae cosechas para que estos puedan alimentarse día con día. Es el peso de la tierra misma, dandole sustento y mantenimiento como lo haría cualquier persona con su ser más querido....
Pero últimamente el peso de la tierra es demasiado para Escalus: pleitos, guerras, odio, rencor, pobleza, hambre, envidia, venganza... todo esto afecta a Escalus quien da soporte en la tierra, provocando que en muchos lugares de NeoVerona haya sequías y la tierra misma se este desmoronando poco a poco....
Los Capuleto tenían un pacto con la Diosa Escalus, a quien se le otorgaría el sacrificio de una chica Capuleto cada cierto tiempo para que habitara en Escalus y así poder tener renovadas fuerzas y seguir luchando contra las ambiciones y sentimientos negativos de las distintas razas.... pero el pacto llegó a su fin cuando cuando los Montesco asesinaron a sangre fría a los Capuleto y así ocuparon su lugar.
Escalus está debil... necesita de nueva fuerza vital para seguir adelante y que NeoVerona no termine derrumbandose, volviendo a ser lo que era anteaño: una tierra de nadie totalmente arida y estéril... es por eso que su más fiel servidora, Ophelia; está dispuesta a hacer todo lo posible para evitar el declive de Escalus y que está siga viviendo, sosteniendo la tierra.
Ella no necesita de rezos, no necesita ni quiere templos ni imagenes suyas a las cuales todos adoran.... la Tierra grita, necesita un cambio... y solo Ophelia y la hija de los Capuleto, la Elegida; son las únicas que pueden escuchar sus ruegos....